La abundancia de los reality show sorprende. Hoy le toca el turno a uno de los tantos que desfilan por la pantalla chica. Se trata de Wife Swap (Cambiemos esposas), que propone en el canal People&Art, algo fuera de lo común: un intercambio de esposas durante 10 días.
El reality hace un trueque de esposas de dos familias diferentes. Las señoras intercambian papeles y, de algún modo, hábitos de vida. Durante ese lapso suceden hechos que obligan a estas mujeres a reflexionar sobre su situación familiar. Pero ¿se animarían las casadas a intentar algo semejante?
En uno de los capítulos, emitidos el domingo pasado, a una dama de la alta sociedad -sin muchas responsabilidades- le tocó visitar una granja, con una familia estricta y guiada por valores religiosos. Al contrario, de este hogar partió la humilde señora que se encontró con un mundo muy lujoso. Los efectos se dejaron entrever: la rica cambió de actitud, mientras que la pobre, reforzó lo que creía. Un reality más que no deja de sorprender.
El reality hace un trueque de esposas de dos familias diferentes. Las señoras intercambian papeles y, de algún modo, hábitos de vida. Durante ese lapso suceden hechos que obligan a estas mujeres a reflexionar sobre su situación familiar. Pero ¿se animarían las casadas a intentar algo semejante?
En uno de los capítulos, emitidos el domingo pasado, a una dama de la alta sociedad -sin muchas responsabilidades- le tocó visitar una granja, con una familia estricta y guiada por valores religiosos. Al contrario, de este hogar partió la humilde señora que se encontró con un mundo muy lujoso. Los efectos se dejaron entrever: la rica cambió de actitud, mientras que la pobre, reforzó lo que creía. Un reality más que no deja de sorprender.
