viernes, 16 de enero de 2009

Centro teatral paraguayo se apresta a celebrar su 20º aniversario

Foto: Puesta de teatro “Hijo de hombre”, representada por el El Centro de Investigación y Divulgación Teatral (Gentileza)

En una nota publicada en el diario paraguayo Última Hora, redacté un material con motivo a los 20 años del Centro de Investigación y Divulgación Teatral (CIDT) y de El Estudio, iniciativa surgida en su interior, que celebra sus 10 años. Su mentor, Agustín Núñez, me comentó algunos detalles de estos años cargados de pasión por el teatro.

Por Sergio A. Noé Ritter

“Estos años se vivieron a pulmón, y cuando uno se detiene a mirar atrás, puede observar una colosal tarea construida granito a granito entre todos”, recordó Agustín Núñez, actual director y fundador de ambos espacios.

Durante este tiempo de presencia en el teatro nacional, el CIDT priorizó la representación de obras nacionales y latinoamericanas, mientras que El Estudio se encargó de la formación de actores.

OBRAS. Entre las primeras piezas montadas por el CIDT figuran Yo El Supremo (1991), un estreno mundial de Augusto Roa Bastos, con versión de Gloria Muñoz y visualización de Ricardo Migliorisi.

A estas obras le siguieron grandes espectáculos, como La Divina Comedia de Colón (1992), de Gloria Muñoz, y Vida y muerte de Chirito Aldama (1993), de Juan Rivarola Matto.

También se desarrollaron actividades con la Escuela Municipal de Arte Dramático, con la que se presentó el estreno mundial de Hijo de hombre, bajo la dirección y adaptación de Núñez, y Pedro Páramo, de Juan Rulfo.

“Considero especiales los montajes de las obras de Roa Bastos; Amar-go (1994), pieza que posiblemente tuvo el mayor número de representaciones en el exterior; y La Divina Comedia de Colón, la de mayor costo de puesta en escena”, rememoró Núñez.

HUELLAS. El CIDT se creó el 18 de diciembre de 1989, tras el regreso de Núñez de Colombia –donde vivió por 16 años– y el reencuentro con Ricardo Migliorisi y Gloria Muñoz.

Posteriormente se vinculó, aunque por breve tiempo, Graciela Amarilla. Pero recién en 1999, se gesta El Estudio, perteneciente al CIDT, con el cual se vino a llenar un área destinada a la formación teatral en el país.

“Considero que cada emprendimiento tuvo un carácter especial e irrepetible, cumpliendo así uno de los objetivos del CIDT, que es la investigación constante del lenguaje escénico. Además, nunca hicimos concesiones de calidad, tratándose de obras de pequeño o gran formato”, expresó Núñez.

Entre los actores y actrices que marcaron su huella en este ámbito escénico están Ricardo Migliorisi, Gustavo Ilutovich, Ramón Del Río, Jesús Pérez, Orlando Amarilla, Líber Fernández, Lisa Bogado, Marco de Brix y otros.

Entre los más jóvenes que se abren camino en este campo están Natalia Nebbia, Mirtha Villalba, Hernán Melgarejo, Dayana Urunaga, Pablo Buder y otros.

Las artes escénicas están de fiesta. En el 2009 se celebra un año más del Centro de Investigación y Divulgación Teatral y de la escuela que la integra, El Estudio. “Estos años se vivieron a pulmón”, afirma el fundador y director de dichos espacios, Agustín Núñez.

El Estudio, una escuela de cara a la sociedad

El Estudio –que pertenece al Centro de Divulgación Teatral– es una escuela que presenta de modo continuo espectáculos con carácter itinerante y de pequeño formato, para una treintena de espectadores.

En principio estaba constituido por Dominique von Thuemen, Patricia Álvarez y Agustín Núñez y se orientaba básicamente a la danza-teatro. Tras la salida de Dominique y Patricia, se incorporó Gabriel Lema, con lo que se dio prioridad al teatro.

Otra figura clave para El Estudio, aparte de Núñez, es el actor, director y dramaturgo Carlos Piñánez, quien se incorporó en el 2002 como director académico y docente de modo permanente.

Entre los proyectos más representativos de El Estudio figuran las actividades desarrolladas con la colaboración del Centro Cultural de España Juan de Salazar, entre las que se mencionan la puesta ¡Por si no sabés!, con gente de la calle, y Brillo de luna, con los trabajadores nocturnos.

En tanto que Ilusiones y el radioteatro de 16 capítulos Casos y cosas de la vida surge del trabajo realizado con las reclusas del Buen Pastor. Este proyecto se difundió en Paraguay y en otros países, como Argentina, Francia, Cuba e Inglaterra.

Chacarita guá fue uno de efectuados por El Estudio, bajo la dirección de Agustín Núñez, que consistió en talleres de escritura de textos dramáticos, inspirados y desarrollados en el popular barrio Ricardo Brugada.

“Evanhy prometió un espacio público”

Agustín Núñez desea que los grupos escénicos de larga data y trayectoria cuenten con un lugar físico municipal “donde poder crear y construir”.

Núñez cree necesario que “los actores seamos considerados por lo que somos: una parte vital de la cultura”.

Pese a que el director de teatro mira el futuro cargado de posibilidades, aún sigue esperando el cumplimiento de una promesa hecha por la actual intendenta de Asunción, Evanhy de Gallegos.

El teatrista aguarda que Evanhy conceda un espacio edilicio “como lo había prometido a los trabajadores del teatro en un encuentro previo a las elecciones municipales”.

Para este año, El Estudio prepara el estreno teatral de Don Justo Balbuena, juez, de Carlos Piñánez.

Las obras que se repondrán son: Circo, también de autoría de Piñánez; La puerta, de Natalia Patricia Santos; y El trueno entre las hojas, de Augusto Roa Bastos.