En Asunción (Paraguay) son varios los sitios que comercializan cuadros, brindando esencialmente pinturas decorativas. Ante la dificultad de seguir abiertos, muchos lugares ofrecen servicios accesorios, como enmarcados.
Por Sergio A. Noé Ritter
Por Sergio A. Noé Ritter
La capital propone tanto a ciudadanos como turistas espacios de arte privados, donde se pueden apreciar y adquirir obras de artistas locales.
Ricardo Migliorisi, Carlos Colombino, Edith Jiménez, Félix Toranzos, Michael Burt, Luis Cogliolo, Enmanuel Fretes Roy, Ofelia Olmedo, Carlos Spatuzza y Jorge von Horoch, son expositores que obligatoriamente se encuentran en la mayoría de esos sitios.
Pese a existir una rica oferta, la artista plástica y propietaria de la Galería Multiarte, Liliana Segovia, reconoce que es muy difícil mantenerse activa en el sector.
"Aparte de la venta de obras, debemos apelar también a rubros accesorios, como en mi caso, el servicio de enmarcados", señaló.
El consumo de obras de arte, en su visión, está estancado porque hay un déficit en la formación de la población.
"No existe una educación que enfatice el ámbito artístico, ya que no se fomenta la apreciación cultural a nivel local", expresa la pintora.
Por eso, Segovia considera importante fomentar la creación de asociaciones de artistas, "que ayudarían a dar cabida a figuras emergentes".
FORMATOS. El rubro más rentable en las galerías de arte son las piezas de pequeño formato. "La gente gusta más de obras decorativas y de tamaños reducidos. Además, en nuestro país no existen muchos coleccionistas de arte", indica Segovia.
Por su parte, el artista Carlos Colombino manifiesta que las galerías "son casas comerciales, que se dedican a vender objetos decorativos y no tanto obras de arte".
Según explica, para que una obra se considere como tal, "debe lograr un planteamiento temático y una cierta expresión, o sea, lograr comunicar algo que uno tiene adentro".
Para Colombino la apreciación de las obras de arte se ve reducida a un pequeño círculo de personas. "Esta burguesía reduce la posibilidad de desarrollar un arte importante, y además –pese a tener un mayor poder adquisitivo–, no valora el arte. Solo le interesa poseer un elemento que decore su pared", indica.
La problemática de las galerías de arte en Paraguay –a su criterio– se debate entre ofrecer propuestas decorativas y no tanto culturales, para poder subsistir.
PRECIOS. Los costos de los cuadros varían, según el artista y la obra. Pinturas de pequeño formato de Luis Cogliolo, por ejemplo, pueden comprarse desde G. 70.000.
Las obras de grandes dimensiones de Carlos Colombino, pueden valer G. 1.800.000. En tanto, que cuadros de gran formato de Edith Jiménez se valúan en 7 y hasta 15 millones.
Las pinturas de pequeño formato de Ricardo Migliorisi, por su parte, oscilan entre los G. 300.000 y G. 600.000.