Foto: Luis Álvarez, violinista paraguayo
(fuente de la imagen: http://www.mca.gov.py/i_bio/luis%20alvarez.jpg)
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Crónica y comentario. El miércoles 26 de agosto de 2009, en el Teatro Agustín Barrios del Centro Paraguayo Japonés (CPJ), de Asunción (Paraguay), se ofreció un espectáculo musical con la familia Álvarez en escena.
Por Sergio A. Noé Ritter
La presentación, que se realizó en el marco de los festejos del 21º aniversario del CPJ, brindó un recital ameno e intimista, en un auditorio que no estuvo repleto.
Esta cita puso a relucir los talentos musicales de cuatro generaciones de una familia, que tiene su tronco inicial con el maestro Lorenzo Álvarez, conocido como el violín romántico de Asunción.
La noche se inició con Danza paraguaya, un clásico ejecutado en solo de piano por Luis Álvarez, quien sorprendió con sus innovadores arreglos.
Inmediatamente, Luis tomó el violín para compartir con la orquesta que lo acompañó, regalando al público polcas y guaranias.
No faltaron en el escenario los demás Álvarez, entre ellos Patricia, quien logró dulces sonidos con su flauta traversa, y Juanchi, quien obtuvo líricas melodías con su violín.
La pequeña Ana Paula, una más de la familia Álvarez, también desató algunas emociones en el público con la ejecución del violín.
Don Lorenzo, el más experimentado de la familia, tuvo la oportunidad de lucirse con una brillante y limpia ejecución del violín.
El añadido vocal -un condimento que parecía faltar- apareció sorpresivamente en medio de la velada, con la voz del invitado Francisco Russo.
Al son de la orquesta, con músicos locales, se pudieron apreciar composiciones de Emiliano R. Fernández, entre ellas la inmortal Che la reina, que fue acompañada por aplausos del público.
Tanto los Álvarez como el cantante Russo contaron con un buen soporte musical, que fue proporcionado por invitados de lujo, entre ellos Remigio Pereira, en el trombón; Lobo Martínez, en piano; Nene Salerno, en bajo; Riolo Alvarenga, en percusión; Julio Sosa, en guitarra; Martín González, en el bandoneón; y Mauricio Pinchi Cardozo Ocampo.
Es así como transcurrieron los Álvarez por el escenario ofreciendo un selecto repertorio en versión instrumental de clásicos locales y latinoamericanos. Escuchar los talentos de toda una familia se tradujo en una propuesta amena, interesante y creativa.
Artículo publicado en Última Hora, el sábado 29 de Agosto de 2009.
Ver esta nota en: http://www.ultimahora.com/notas/250394-C%C3%A1lido-e-%C3%ADntimo-recital-de-la-mano-de-una-familia
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