Tras la victoria de España en el Mundial, la televisión paraguaya se hizo eco de una eufórica e inédita alegría, y los canales del mundo se tiñeron de amarillo y rojo. Por Sergio A. Noé Ritter.
El triunfo se vivió a todo dar en las calles de la península ibérica y hubo una suerte un diabólico cóctel en la televisión. Todas estas imágenes se mezclaron con las de los futbolistas, entre ellos Iker Casillas, además de saltar a la palestra televisiva Sara Carbonero y el afamado pulpo Paul.
Estas figuras se mezclaron en la pantalla en una suerte de ensalada rusa, convirtiéndose en la sensación del momento, abarrotando no solo la primera plana de los matutinos, sino también de los noticieros del globo.
No solo sorprendieron al mundo los aciertos del molusco marino del acuario alemán, sino la inusual entrevista de la periodista Sara Carbonero al capitán de la selección española, que es su novio.
Este, en un momento de sobresalto y eufórico regocijo, le soltó un beso en la boca frente a las cámaras, ante la sorpresa de todos. Pese a los malos arbitrajes del Mundial y los múltiples elementos de contexto. La fiesta del fútbol acaparó intensamente la televisión.
Publicado en Última Hora (versión impresa), página 42, martes 13 de julio de 2010.
Foto: Festejos en España. Créditos: Fotos de "RinzeWind", en Flickr (http://www.flickr.com/photos/rinzewind/356688442)