Foto: Las reclusas entusiastas del Buen Pastor (Penitenciaría de mujeres de Asunción, Paraguay) procuran formar figuras variadas con las hojas.Un profesor peruano difunde en Paraguay el arte japonés de plegar el papel. Ahora enseña en las cárceles de Asunción (Paraguay), como el Buen Pastor y Tacumbú, como una terapia de autoestima y como ocupación para los largos ratos de ocio.
Por Sergio A. Noé Ritter
El origami, conocido también como papiroflexia, es un arte de origen japonés abocado al plegado de papel para la obtención de figuras de formas variadas.
Esta disciplina artística también se enseña en Paraguay, y es una materia de interés para el profesor peruano Daniel Julcamanyan, quien instruye a internos de las penitenciarías de Asunción, tales como la del Buen Pastor, para mujeres, y Tacumbú, para varones. Los talleres están auspiciados por el Centro Cultural de España Juan de Salazar en Paraguay.
El docente enseña esta técnica por primera vez en Paraguay. Considera que detrás de los barrotes "hay un gran talento, además de un elevado entusiasmo de los participantes".
EXPERIENCIA. Una las bondades de la papiroflexia es promover la autoestima en las personas, según explica el profesional.
"Las internas del Buen Pastor (Penitenciaría de mujeres de Asunción, Paraguay) se sienten realizadas cuando terminan sus figuras de papel. Esto les motiva bastante", detalla el experto.
Afirma, además, que este grupo de mujeres es perseverante. "En cada jornada, salgo una hora después de lo previsto, ya que están muy entusiasmadas por aprender", dice el especialista.
Considera que la experiencia tiene una proyección futura, ya que tiene una propuesta para el año entrante de llevar el curso a otros correccionales.
MÓDULO. El taller busca formar en el plegado de figuras, en un nivel elemental.
"Enseño un origami básico, enfatizando los procesos. Utilizamos solamente papel, en forma de cuadrado perfecto, donde el arte de encastrar las formas es clave", indica.
Julcamanyan señala que durante el proceso se utiliza el papel blanco, porque "ayuda a memorizar y agilizar más el proceso del plegado".
Los colores, explica el especialista, brindan una mayor libertad en su combinación, dando como resultado detalles más interesantes.
El experto asevera que la función de la memoria es importante, porque todo es un proceso. "Para fabricar una pirámide de papel, se requiere recordar los pasos de un origami sencillo", dice el profesor.
Cuenta que las reclusas ya hicieron todo tipo de figuras, incluyendo "un pajarito, un pollito, un escorpión, un alacrán, un reno y una clásica grulla".
Para ejercitar más la memoria y las destrezas de las internas, el especialista también propone realizar figuras geométricas.
"El proceso se inicia con figuras pequeñas y sencillas, para luego llegar a formas de gran dimensión y complejidad", expone.
UTILIDAD. El profesional indica que "más que un entretenimiento", el origami se puede aplicar en distintos campos. Julcamanyan detalla que en la parte artística se pueden crear "maravillosas esculturas de gran formato".
En el área de las matemáticas, se aplican los conocimientos de geometría. "Cada uno aprende sobre las figuras planas, los ángulos, los vértices y otros conceptos", afirma el especialista.
En el ámbito de la medicina, el educador destaca que ayuda a afinar la capacidad motriz, además de "educar en la paciencia y el ejercicio de la memoria". El origami también inspira a los modelos de la ingeniería industrial y el diseño de modas.
OPINIÓN:
"Es una terapia muy buena"
Por Zulema Morales, interna del Buen Pastor (Penitenciaría de mujeres de Asunción, Paraguay).
"Para mí, el curso es bastante innovador. Aquí en la correccional conocí el origami. Al principio pensé que se jugaba con papel y que era una cuestión de niños. Ahora, considero que es una terapia muy buena, ya que me ayuda a ocupar mi tiempo en algo útil. El origami me ayuda a concentrarme más y a volver a refrescar los conocimientos de matemáticas. Es preciso saber la cantidad exacta de pliegos del papel, ya que una desatención significa un error en el trabajo. Además, me ayuda a desarrollar bastante la paciencia. A veces, cuando no obtengo la figura deseada, me siento impotente, porque un pedazo de papel me desafía bastante. Es una cuestión que me suele ocurrir, porque deseo ver la figura terminado. Incluso, ya les enseñé a mis hijos la técnica."
Foto: Última Hora, Asunción, Paraguay.
Artículo publicado en Última Hora, el lunes 14 de noviembre de 2009.
Ver esta nota en: http://www.ultimahora.com/notas/282279-El-origami-llega-a-las-penitenciarías---como-distracción
