El cantante Vitalino Rodríguez Báez, más conocido como Alberto de Luque, disfruta en familia de una Navidad diferente, tras un accidente vial, en junio del 2010, que casi le costó la vida. En esta entrevista, el músico comenta sobre su presente y sus proyectos para el 2011. Por Sergio A. Noé Ritter.
Alberto de Luque, el cantante nacido en la ciudad de Iturbe (departamento del Guairá) un 12 de marzo de 1938, cuenta con un legado artístico que supera las 900 canciones grabadas durante una carrera de casi tres décadas, en las que pisó escenarios en unos 25 países.
El músico, de 72 años, con una prótesis en la pierna izquierda a causa de un accidente que tuvo en el 2010, no se deja abatir por el desaliento y prepara un disco para el 2011, además de una fundación para víctimas de la inseguridad vial.
– ¿Cómo pasará esta Navidad?
– Es como mi primera Navidad, porque estuve prácticamente al borde del más allá. Gracias al cariño que me brindaron mi esposa y mis hijos, pude recuperarme de este difícil trance que no fue fácil. Será una Navidad en casa, en familia, donde disfrutaré de esta nueva oportunidad que me dio Dios para vivir. Compartiremos con los hijos y mi esposa, además de mis nietos.
– ¿Qué tiene de especial esta festividad en comparación a otras?
– Luego de todo lo que sufrí, será una Navidad especial. Increíblemente, estoy con tantas ganas y con varios proyectos para el año entrante. Pasar esta Navidad con mis familiares me fortalece sobremanera.
– ¿Cómo califica su vida tras el accidente?
– Mi vida ha cambiado y la de mi familia también. En este punto -tengo que ser sincero-, debo dar mi eterna gratitud a mi esposa Mavi Mosqueira, que supo plantarse a mi lado -día y noche-, durante los dos meses de mi hospitalización en el IPS, donde los días fueron interminables. Pasé por la duda y viví la ansiedad de saber si salvaba mi pierna. Fue terrible transitar por esta incertidumbre. Llegué a sufrir una barbaridad, aunque solo recuerde cerca de un 15 por ciento de lo que me sucedió.
– Musicalmente, ¿cómo se siente?
– Todas las tardes practico, hace más de un mes y medio. Canto a partir de las tres de la tarde durante una hora y media. Comienzo a practicar porque, gracias a Dios, estoy proyectando lanzar un disco a fines de enero, que aún no tiene un título.
– ¿Qué temas tendrá?
– Grabaré música paraguaya y clásicas guaranias, como Ñemity, Qué linda es la tierra mía -que posiblemente sea la canción más simbólica de mi carrera, porque fue Premio Nacional en el 2009-, Muchachita campesina, Ruego y camino, y otros. También se incluye una guarania inédita que está vinculada al motivo del accidente que tuve.
– ¿De qué trata?
– Mi señora escribe poemas y ella dedicó unos versos a un episodio que vivimos juntos. Surgió de una decepción cuando no pudimos comprar una casa de fin de semana en Areguá, a orillas del lago Ypacaraí. Entonces, ella (Mavi), escribió ese poema, ya hace 15 años, que tituló Otro amanecer, y yo lo musicalicé hace un año. Cuando le canté por teléfono a los Parini -nuestros amigos que nos ayudarían para comprar esa casa en Areguá-, quisieron escucharla personalmente. Por ello, me invitaron a comer lasaña.
– ¿Cuándo ocurrió eso?
– Fue el sábado 19 de junio de este año. Cuando fuimos a Areguá, a la casa de la familia Parini, no recordamos el lugar porque hace tiempo que no los visitábamos. Entonces, nos detuvimos en Caacupemí, para preguntar dónde quedaba el lugar. Al cruzar la ruta, una moto me agarró en la pierna y me tiró tres o cuatro metros. Finalmente, los Parini no pudieron escuchar mi canción, que ahora la voy a grabar.
– ¿Qué dice la letra?
– (Cantando) Prometí en la playa: empezar de nuevo otro amanecer, pero el cruel destino truncó mi esperanza, y no pudo ser... Polvo, arcilla y barro: otro amanecer.
Publicado en el diario Última Hora, el viernes 24 de diciembre de 2010
Este artículo también puede leerse en: http://www.ultimahora.com/notas/389462--Luego-de-todo-lo-que-sufri,-sera-una-Navidad-especial
Foto: Alberto de Luque. Créditos: Última Hora.
